DIARIO DE ABORDO. Semana 8.


La lluvia
ha usurpado el protagonismo de la semana,
teniéndonos a expensas 
de su percusión impredecible.
Cayendo con sus gotas en las gargantas
invadiéndonos de gripe 
y de nervios desorientados.
Trayendo gente a cuentagotas
y en diluvios universales,
para no perderse la riada
de este barco que se marcha.

Y nosotros, agradecidos
con las sonrisas congeladas
aguantando nuestras piernas
y nuestras almas.
Porque al final merece la fiebre,
cuando los ojos se llenan de aplausos,
y de mareas, los pulmones.



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1 comentarios

  1. Con qué facilidad cuentas con música, una semana en el barco de trabajo duro, epidemia de gripe, y un tiempo endemoniado, durante los últimos preparativos del estreno. Pero ha merecido la pena, el estreno ¡UN ÉXITO!

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